1.11.08

Capitulo 4



Blanco. Todo lo que veía estaba en blanco, tan falto de color que lo cegaba, lo agobiaba. Desesperación corriendo por cada parte de él, su mente asfixiándolo. Ya no podía más, deseaba gritar, sus ojos cerrados se apretaron con fuerza, su garganta estaba seca, y se sentía nervioso, ansioso, y muy desesperado, sabía que en cualquier momento iba a explotar.



Un golpeteo rítmico, y rasgueos como si fueran caricias lo hicieron explotar. Sus ojos se abrieron sin aviso y sus labios dejaron escapar todo lo que sentía en forma de hermosas letras entonadas por la música. Sus sentimientos se transportaban a la letra, su alma se ponía en cada entonación.



Lentamente, comenzó a encerrarse en un mundo a parte, dejo de escuchar cualquier sonido que no fuera el de su corazón golpeando contra su pecho, incluso su propia voz le parecía algo demasiado lejano. Vagamente se escuchaba, poco entendía lo que decía, y el golpeteo de la batería y los rasgueos de la guitarra y el bajo habían desaparecido, como prontamente lo hizo el de su voz. Se abandono por completo, y el golpeteo en su corazón sé hacia más rápido, su pecho comenzaba a dolerle de lo fuerte que era.



Comenzaron a aparecer imágenes borrosas en su cabeza, en una secuencia que se repetía una y otra vez. Abrió los ojos con sobresalto, interrumpiendo todo el proceso de grabación, su frente estaba perlada de sudor a pesar del aire acondicionado, y su respiración estaba agitada. Paso su mirada por los rostros de los que estaban presentes en la sala, todos ellos se veían preocupados, y confundidos.



-¿Estas bien?.-



Escucho que alguien preguntaba con voz preocupada. No supo reconocer la voz, y todo se volvió borroso, dejo de escuchar las cosas y sintió que toda su fuerza abandonaba su cuerpo, hasta que, simplemente, dejo de estar conciente.





//DEPARTAMENTO DE KEN//





-Y en si, eso es todo lo que paso.- termino de narrar su historia, recibiendo de lleno la mirada de desaprobación de Ken, por lo cual desvió su mirada hacía cualquier punto de la pared.



-¿Y té quedas tan ancho?, ¿Así cómo si no hubiese pasado nada?, Te ha pegado lo descarado.- aun no creía lo que escuchaba, vaya que había descuidado mucho esa relación.



-¿Qué querías que hiciera?, ¡Los hubieras visto! Todo ha sido culpa de ellos, así que deja de reñirme que no vine para eso.- comenzaba a molestarse, ¿qué nadie iba a estar de su parte?



-No, mete el freno de mano ahora Tetsuya.- contesto molesto, si había venido a verlo, ¡ahora iba a oírlo!. -¿Lo dejaste explicarte las cosas?.- Tetsu iba a responderle algo, pero Ken no lo dejo. -¡Seguro que no! Siempre es igual Tet-chan. Siempre que ves a Haido con Camui-san tus celos te ciegan, y es imposible hacerte entrar en razón. Créeme que a veces me pregunto como siguen juntos ustedes dos.- a pesar de haberlo dicho con calma, se notaba que estaba molesto.



-Se supone que debes apoyarme. No vine a que me estuvieras regañando.- dijo molesto. Por fin dignándose a mirar a su amigo.



Ken soltó un gran suspiro, realmente cuando Tetsu se ponía en ese plan era insoportable. Y viendo la actual situación, tenían que dar un premio a Hyde por soportar a Tetsu. Es más, ¡Debían darle un premio a él por soportar los problemas amorosos de esos dos!. Si, ya estaba convencido, sí algún día dejaba de hacer música, empezaría a cobrarle sus servicios de psicología a Tetsu.



-Además... sí Camui no estuviera en medio no tendría problemas con Haido.- continuo tercamente. Tratando de mostrarle a Ken lo mal tercio que era Camui.



-Eso que te lo crea otro Ogawa.- soltó una ligera risa antes de continuar. -Antes de Camui era Megumi, y antes de ella fue Sakura, así que con Camui o sin él, igual tienes problemas con Haido. Tu sabes como es, le gusta que le hagan sentir bien todo el tiempo, pero no que le agobien, lo cual es muy contradictorio, como Haido mismo.- puso una mano en su barbilla, y cruzo su pierna izquierda sobre la derecha, dándole tiempo a Tetsu para que pudiera contraatacar.



-Camui lo agobia.- dijo convencido. -Eso no lo puedes negar, solo hay que ver como lo mira... ¡Y como lo toca! Y su forma de ser... - hizo un gesto de desagrado, realmente se empezaba a sentir enfermo.



-Bien, te voy a conceder eso. La forma en que Camui mira a Haido es de suma adoración, pero no cae en fanatismo, eso puedes verlo. Son amigos, y sabes bien que Haido es sobre protector con sus amigos. Nadie puede hablar mal de ellos en presencia de Haido, amenos que quiera poner en peligro su autoestima e integridad física.- dijo todo aquello como si fuese una broma, pero su semblante serio daba a entender lo contrario.



Se quedaron en silencio algunos minutos, hasta que Tetsu comenzó a reír y Ken sonrío ligeramente, esperando ansioso la conclusión de Ogawa.



-A veces olvido que Doiha protege a sus amigos como si temiera perderlos.- dio un suspiro, y una ligera sonrisa se apodero de sus labios. -Pero no lo sé, a veces me siento muy poca cosa comparado con Camui, Sakura y Megumi... sigue dándome miedo que algún día se harte de mí y me cambie por alguno de ellos.- se encogió un poco sobre sí mismo, y la sonrisa se volvió una mueca indescifrable. -Megumi puede darle otro hijo... ellos siguen siendo muy buenos amigos, Sakura... a veces creo que él sabe más de Haido de lo que yo podría saber en toda mi vida... y Camui.- Ken no lo dejo continuar.



-Ya basta Tet-chan, suenas demasiado fatalista.- se levanto y se acerco a Tetsu. -Para Haido eres él mejor, ¿por algo esta contigo, no?.- y finalmente lo envolvió en un abrazo, silenciosamente tratando de levantar su autoestima.



Tetsu se dejo llevar por el abrazo protector de Ken, deseaba sentirse con más seguridad en sí mismo, con más seguridad en su relación (sí se le podía llamar así) con Hyde. Pero el ultimo encuentro verbal lo había dejado demasiado vulnerable. Las cosas estaban avanzando con mucha rapidez, y no tenía tiempo de procesar una porque, inmediatamente sentía la otra llegar.



En ese momento solo deseaba dormir y esperar a que las cosas se calmaran y volvieran a su ritmo normal. Con él como único dueño de la atención de Hyde. Porque cada mirada y cada gesto de Hyde debían ser para él. ¿Qué importaba si Hyde sonreía para una fan?, la chica en si no era muy significativa en el corazón de Hyde, pero Camui, Sakura y Megumi si que lo eran.



-Deja de pensar y duérmete. Tienes que descansar para poder tener una estrategia de cómo conquistarás a Akuma, ya que después de esto que me has dicho, dudo que quiera verte en, como mínimo, un par de meses.-



-No me hace sentir mejor... pero se que es mi culpa, ¿de acuerdo?. Me lo gane esta vez.- dijo rápido, antes de que Ken volviese a decirle lo mal que había hecho. -Pero sabes, lo más cruel es que lo veré en los ensayos... pero no podré acercarme a él... .- volvió a sentirse mal, triste y desolado. Odiaba pelear con Haido, pero a veces parecía que era lo único que sabían hacer.



Las cosas habían sido así desde que podía recordar, desde que habían iniciado esa relación, pero en los últimos años, se había vuelto todo aun más duro que antes. Empezando por Megumi, y terminando por Camui, a quien pareciese que el vocalista de L'Arc en Ciel tomaba más en cuenta que al propio Tetsuya.



Sabía que estaba actuando mal, pero el que Hyde se la pasara hablando de lo bueno que era su amigo, y de todo lo que le enseñaba, le llenaba el alma de celos, y le destrozaba cada fibra de su autocontrol. Y lo peor, que cuando le hacia la más ligera critica, Hyde saltaba en su defensa sin que le importase nada. Y él, en vista de que se sentía atacado y peor aun, celoso, respondía los ataques verbales de su amante con lo que se le hiciese más fácil, ya fuese callarlo de un puñetazo o responder los mordaces comentarios de Hyde.



Ken sintió que Tetsu volvía a tensarse, y comenzaba a preguntarse si no le había ocultado algún detalle. Conocía esa relación desde el momento en que Tetsu andaba atrás de Hyde, y había sido el quien había logrado convencer a Sakura para dejar a Tetsu salir con Hyde. Sentía orgullo de conocer esa relación de pies a cabeza, pero aun así se preguntaba ¿cómo diablos seguían juntos?... dio un largo suspiro, y acaricio la cabeza de Tetsu hasta hacerle dormir.



Camino hasta la puerta, y tomo el teléfono, marco el número y espero a ser atendido, conciente de la hora que era. Una, dos y tres veces, parecía que no hubiese nadie, pero esa escena ya la conocía. Solo era cuestión de segundos para que descolgaran el teléfono.



"-¿Qué quieres Ken. ?.-" la voz sonó con brusquedad, haciendo notar lo poco que le importaban los modales, y lo molesto que su llamada le resultaba en ese momento.



"-Me alegra saber que me aprecias tanto, Sakura-chan... pero creo que no estas de juegos hoy, y la verdad yo tampoco... .-"



"-¿Qué quieres. ?.-" repitió su pregunta, con voz apretada.



"-Haido, ¿esta ahí.?-" era muy normal que el vocalista estuviese siempre en casa de Sakura cuando discutía con Tetsu, pero Ken no sabía hasta que punto estaría (si es que lo estaba) enterado Sakura...



"-No. Tiene tiempo que se fue.-" Le pareció extraño... y las sospechas volvieron, su mente trabajó lo más rápido que pudo conectando piezas, y se descubrió amenazando telefónicamente a Ken con una voz que, solo usaba cuando estaba protegiendo a alguien. "-Si Ogawa le ha hecho algo a Hide, ninguno de ustedes va a salir bien librado, Ken.-" dicho esto colgó, y salió de su apartamento, directo a casa de Hyde, quería respuestas, tenía preguntas... y ahora si Hyde no iba a librarse de responderlas



Solo había dado dos pasos fuera de su piso, cuando su celular sonó, dejando escuchar la musiquilla que era especialmente para las llamadas de Hyde, así que le cogió con prisa, visiblemente alterado.



"-Hideto... .-" Se calló cuando escucho un sollozo ligero del otro lado del móvil, y su angustia creció, Hyde lloraba. "-¿Qué pasa Hide-chan. ?.-"



Sin embargo nadie le respondió, solo escuchaba a Hyde hablando con alguien a quien no conocía. Escuchaba toda la conversación, y supo que hablaban de Camui Gackt, el más reciente amigo intimo de Hyde. Al parecer era uno de los amigos de éste quien le informaba a Hyde sobre un estado de salud o algo parecido.



Dándose cuenta de que a Hyde se le había activado el móvil sin querer, el dio por terminada la llamada, y se metió al elevador con las manos en sus bolsillos, su cabeza martillándole, sus ojos ardiéndole y su estado emocional alterado. Mil preguntas desfilaban en su cabeza, y todo se le hacia tan claro pero tan confuso a la vez.



Se recostó en su cama, decidido a dormir las pocas horas que le quedaban, mañana que su mente estuviera más aclarada, pensaría que hacer y que no debía hacer. Además de comenzar a analizar la velada que había tenido con Hyde, y su estado emocional. Pero todo eso sería mañana, y con ello en mente, Sakura cayó en un sueño intranquilo y poco reparador.

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